Mujer emprendedora
Este post lo escribo pensando en ti.
Hace unos días celebramos el día de la mujer emprendedora. Hablé un poco, no escribí nada nuevo, ya es un tema recurrente en mis posts y lo seguirá siendo, porque me he topado con la gran dificultad de querer crecer como profesional y como madre y esta batalla parece siempre una derrota en uno u otro escenario. Pero a raíz de mis palabras una mujer, como yo, emprendedora, como yo, me hizo ver que a menudo se silencian sus luchas.
Esta mujer me habló de dejar tu carrera para dedicarte a la crianza. Abandonar aquello para lo que te preparaste y por lo que luchaste para emprender en otro ámbito, mucho más complicado y tristemente menos reconocido, tu hogar, tu familia.
Yo quisiera la fuerza de esa madre que renuncia porque entiende que su victoria esta con sus hijos. Yo admiro y celebro el emprendimiento de esta mujer que elige vivirse completa y sin tiempos pospuestos. Espero, compañera, que este abandono fuese una guerra ganada, que seas feliz y siembres futuros cada día, que tu decisión no te pese, que te creas libre y capitana de un proyecto de eternidad, porque lo eres.
Yo pienso en mi abuela, en su carrera de maestra no ejercida, en su vida dedicada a otras vidas. En cómo fue madre de dos hijos que a su vez engendraron otros hijos, matriarca, sin creerlo, sin saberlo, de una familia fuerte, unida y libre. Yo quisiera, amiga, que supieses hoy que tu emprendimiento será el germen de una historia interminable, quisiera que supieras que tu trabajo es el más importante de todos porque eres la tierra en la que se siembra el futuro.
No sé si por momentos echas de menos aquello que dejaste, entiendo que sí, esa es la naturaleza humana, la nostalgia y la duda forman parte de nosotras siempre, pero si es así, al menos hoy, quisiera que te celebrases completa, con tus hijos en brazos, cansada y feliz, porque eres cimiento y jardín de un hogar que crece.
Gracias a todas las que decidisteis emprender en casa, en un oficio que no se celebra, como si la vida no fuese razón suficiente para fiestas.
Ojalá mañana no se hable de renuncia si no de elección. Ojalá tú sepas celebrarte cada día. Feliz vida, compañera.
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