La importancia del cole en tiempos de coronavirus

Lo más importante sobre esta vuelta al cole es que los niños necesitan reconquistar las escuelas.

Análisis por edades

Evidentemente no será esta necesidad la misma en todos los rangos de edad, y es que el menor de 2 años, habitualmente, es feliz en casa y si sus padres pueden acompañarlo, no va a necesitar mucho más; sin embargo a partir de los 3-4 años y especialmente por encima de los 6 años la escuela es mucho más que un lugar donde aprender sobre números, letras o ciencia, la escuela es un aprendizaje de vida.

• De este modo, a todas las que me preguntáis os digo lo mismo. Los niños menores de 2 años necesitan básicamente un acompañamiento, alguien que les quiera y esté con ellos, pero no necesitan ni deben tener una enseñanza clásica, es decir, su desarrollo se va a relacionar mas con el juego y los lazos afectivos. Si tenéis una guarde con un ratio bajo de niños por aula (que las hay me consta y conozco algunas que son una maravilla), con actividades libres en las que se atiende a las necesidades de cada niño de forma individual, entonces, disfrutadla. Pero si hablaos de una guarde con más de 20 niños por aula y de corte “clásico”, yo, este año, la evitaría, pero esto es solo una opinión personal.
• A partir de los 2 años dependerá mucho del tipo de niños, y es que veréis que hay niños que a esta edad aún no precisan cosas diferentes a los más pequeños mientras que otros manifiestan ya una gran inquietud por aprender y relacionarse con sus iguales. Igualmente si me preguntáis qué hacer este año con los mayores de 2 años, os diré que depende y que quizás este año por lo que tiene de peculiar, no será el mejor año para iniciar la escolarización.
• Los mayores de 3 años no tienen que asistir a clase de forma obligada, ya que el período de enseñanza obligatoria va de los 6 a los 16 años; si bien a los 3 años suele haber ya un interés por aprender y a menudo en casa no puede aportársele todo lo que necesita y además el niño de 3 años busca la interacción con otros niños.

• En el caso de los adolescentes el colegio es además de aprendizaje un refugio y un inicio de la vida adulta. El colegio constituye un mundo propio donde ellos pueden ser ellos sin el lastre que supone ser tratado siempre como un hijo. Soy adulto, me tratan como adulto y respondo como adulto.

El daño

El cierre de las escuelas ha supuesto el nacimiento de un abismo entre unos niños y otros; esta brecha se ha hecho inmensa para aquellos niños con necesidades especiales y niños en riesgo de exclusión social. Las escuelas han sido son y serán un lugar de libre acceso. El derecho a la educación debe ser universal e igualitario.

La  UNESCO, UNICEF y OMS advierten los daños que pueden derivarse del cierre prolongado de las escuelas.

A pesar de haber tratado de encontrar bibliografía seria sobre cómo el cierre de las escuelas está afectando emocionalmente a nuestros hijos no he encontrado ningún artículo que tratase este tema en profundidad, lo que me lleva a pensar que se está teniendo poco o nada en cuenta esta pérdida que han sufrido los niños.

Parece que nos preocupan ellos en la medida en que pueden ser vectores de la enfermedad y en la medida en que pueden sufrir síntomas de COVID, pero se ha dedicado poco tiempo a evaluar los daños psicológicos que esta carencia de escuela pueden acarrear a nuestros hijos.

Reflexionando sobre el tema he resumido los principales problemas no médicos, secundario al cierre de las escuelas en los puntos siguientes.

• Hambre de aprender

Los niños manifiestan, desde muy pequeños, gran ansia por aprender. Se hacen múltiples preguntas y llega un momento en que en casa no podemos enseñarle todo lo que necesitan, el papel de la escuela es vital para permitir el crecimiento personal de nuestros hijos.

• Pérdida de relaciones sociales

A esta edades es fundamental el contacto social con sus iguales, ello les lleva no solo a aprender si no también a reforzar su identidad. Los padres seguiremos siendo parte fundamental de su vida pero lo sano es que se establezcan relaciones de apego con otros iguales lo que además reforzara su individualidad y su seguridad en sí mismos.

En los adolescentes pérdida de confidentes con los que trataban ciertos temas que no tratan con los padres y que, por el carácter reservado de la mayor parte de los adolescentes, es probable que queden silenciados y puedan constituir un problema futuro.

• Pérdida de seguridad/estabilidad

La asistencia clase y las actividades extraescolares les ayudan a mantener rutinas y estabilidad. Las pérdidas de rutinas en niños predispuestos pueden acrecentar la sensación de ansiedad o tristeza precipitando insomnios, comportamientos desafiantes, aislamiento, alteración de la ingesta etc.

• Disminución de la actividad física

lo que se traduce no solo en una pérdida de salud física si no también en un aumento de la ansiedad y secundariamente en una alteración del comportamiento y el sueño.

• Aumento del uso de pantallas

A menudo debido a que los padres están ocupados, los niños pasan horas delante de las pantallas, muchas veces sin supervisión.

Problemas derivados de la educación no presencial detectados y analizados por distintos organismos

Desigualdades

• Brecha tecnológica por falta de recursos que provocará que haya niños que no tenga acceso a la telenseñanza porque no tiene posibilidad de hacer uso de un ordenador.
• Padres que no pueden colaborar en el aprendizaje de sus hijos
• Falta de referentes: Hay hogares en los que, por desgracia, no existen referentes adultos que sirvan de guía y a menudo, los niños toman como figura a seguir a algún profesor que se convierte en el referente adulto.
• Menos oportunidades educativas fuera de la escuela; niños en cuyas familias no se realizan actividades lúdicas o domésticas de las que pueda extraerse algún aprendizaje: excursiones al campo, lectura de cuentos, juegos de números…
• Mayor tasa de abandono de la enseñanza no obligatoria por las necesidades económicas familiares. Y es que imaginen que si tengo ya 16 años y estoy en ese momento clave en que tengo que decidir si sigo estudiando o no y justo en ese impasse se detiene mi vida, me veo de nuevo en casa, en una casa que necesita de mis manos para trabajar y aportar… ¿no creen que será complicado que retome después mis estudios?

Otros problemas

• Peor alimentación: Ya es conocido que hay niños que suelen comer en las escuelas, o bien gracias a una beca comedor o simplemente porque sus padres hacen uso de este servicio. Se sabe que a menudo los niños que se beneficiaban de la beca comedor, estarán en casa realizando comidas peores, más escasas y menos nutritivas.
• Aumento de la violencia doméstica derivado de la mayor estancia en casa en situaciones de estrés. Además no tienen la red de seguridad que supone el acceso a otras personas (colegio y amigos) que puedan detectar esta violencia y ayudar y apoyar al niño.
• Aumento de consumo de sustancias. Sí, esto también. Adolescentes que han perdido las rutinas y la estabilidad que los mantenían centrados y que acuden al consumo de sustancias como modo de refugio.
• Imposibilidad de conciliación: muchas familias se verán obligadas a disminuir su jornada laboral o incluso a dejar de trabajar, probablemente, siendo las más afectadas las mujeres, nuevamente.

La educación es un derecho; debe ser universal, libre, igualitaria y accesible. Tenemos que volver la vista hacia ellos y pensar en ellos. Está claro que facilitar una apertura de los colegios de un modo seguro debía ser una prioridad y sin embargo ha quedado relegado al último momento, a un trámite para cubrir expediente, a un listado de medidas imposibles dentro de un marco de expolio que era la educación pública. Nuestros hijos tienen derecho a asistir a clase y aunque evidentemente, lo primero será la salud y la vida, hay que reconquistar las aulas y para ellos debemos seguir luchando ya que parece que las prioridades, en esta sociedad, nunca serían los niños.

Así que sigamos pataleando.

**Hemos analizado en este especial vuelta al cole: Las medidas de la Junta de Andalucía, El papel del niño en la pandemia y el documento del ECDC y el estudio Kids Corona, la importancia del colegio y la última gran pregunta ¿Qué vas  hacer tú?