Lactancia: tipos de leche
“Es que no me ha subido la leche, y se queda con hambre»
Me decido a escribir esta entrada porque cada día me frustra encontrarme en mi trabajo madres que en las primeras horas de vida y a pesar de sus ganas de amamantar, han introducido ya al bebé un biberón de leche artificial. “Es que no me ha subido la leche, y se queda con hambre». Yo siempre les insisto en que eso la naturaleza ya lo sabe, es decir, todas la madres producen los primeros días CALOSTRO, todas tienen esa leche densa y escasa en cantidad, y con ella se van a nutrir los recién nacidos, sin necesidad de suplementación. A pesar de ello, suelo llegar tarde y ya han iniciado los biberones.
A mi juicio se unen tres factores;
- El desconocimiento de los padres (esto es responsabilidad nuestra, de los pediatras, es por ello que me gustaría poner en marcha una primera consulta al pediatra previa al parto),
- La ansiedad de la primeriza
- El falso criterio de autoridad, por el cual aparece una enfermera,. madre, tía, abuela, auxiliar… y es quien indica la necesidad de biberones porque ese niño «se está quedando con hambre».
Ante esta terrible aseveración ¿qué madre en su sano juicio podría quedarse impasible e insistir en una lactancia exclusiva?
La leche materna pasa por tres fases o leches distintas:
1. Calostro:
El calostro es la “primera leche” y está presente durante los primeros 3-5 días después del nacimiento del bebé. Es un fluido de color amarillento, más viscoso y denso que la leche materna. Se produce en pequeñas cantidades (entre 1 y 3 cucharaditas los primeros 3 días). Es rico en proteínas, hidratos de carbono y anticuerpos y bajo en grasas.
El calostro es rico en anticuerpos y otras proteínas protectoras. Como alimento constituye la primera inmunización de los bebés recién nacidos, les ayuda a regular su sistema inmune protegiéndoles contra diversas infecciones.
- Contiene factores de crecimiento, que ayudan a madurar el intestino de los pequeños, para funcionar con eficacia. Esto hace más difícil que los microorganismos y las sustancias alergénicas se desarrollen en el cuerpo de los bebés recién nacidos. Además es discretamente laxante y estimula la eliminación de meconio.
- Pequeño volumen: lo que se adapta a las necesidades iniciales del recién nacido y favorece tomas frecuentes que estimulen al pecho ara la producción de leche.
- Alto contenido en azúcares, y vitamina A
- Aunque nos parezca que es poca cantidad la que producimos de calostro, no debemos olvidar que la capacidad del estómago del recién nacido es muy reducida, y por ello que demandará alimento muy a menudo. El calostro, además, es de muy fácil digestión.
2. Leche de transición:
Aparece tras el calostro y dura unas dos semanas
3. Leche madura
Debéis leer más sobre el calostro en este enlace de la liga de la leche.
Os animo a ser valientes y decididas y si queréis lactar desde el primer día,que nadie os quite ese derecho. Estáis en disposición de rebatir con argumentos científicos la consabida frase de “No te ha subido la leche, el niño se queda con hambre». Ahí está las armas, ¡usadlas!
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