globo animado

Disculpe, estoy trabajando

Imagen de  Ana Oncina

 

Ay, no sabéis a que nivel de saturación y decepción he llegado para animarme a escribir este post.

Me llamo Marta, soy pediatra autónoma, si trabajo ingreso y si no pues no.  No tengo un sueldo fijo, tengo una empleada, un alquiler, una factura de luz y agua de mi negocio, otra de internet, un fungible diario, y todos los gastos en casa que tenéis los demás: hipoteca, luz, agua, teléfono, colegios, ropa, comida… dos niños, dos perros y dos gatos. ¿Qué quiere decir esto? Que yo también necesito cobrar para vivir…

Igual os parece de perogrullo pero me veo obligada a aclararlo porque parece que hay quien no lo entiende y quien me llega a reprochar que no haga mi trabajo gratis.

¿Sabéis qué? Yo ya hago mucho trabajo gratis, porque sí, porque creo que divulgar es fundamental, que la educación sanitaria es prioritaria y por ello, aunque nada económico me reporta, dedico varias horas al día a estudiar, comparar, resumir y escribir todos esos posts que podéis leer en abierto y que me consta, a muchos os sirven porque hay gente agradecida (no sabéis el bien que me hace) que sí me ha escrito para darme las gracias. Además de eso, esto podréis corroborarlo muchos, sabéis que aunque no debiera, tiendo a responderos todas las dudas posibles  a través de redes sociales (nunca he sido una gran empresaria).

Estos días de locura he intensificado mi trabajo hasta límites que ya atentan contra mi salud y la de mi familia. No paro de leer y estudiar, y trato de ofreceros un contenido científico y tranquilizador porque creo firmemente en la necesidad de dar estos mensajes, porque yo, como madre, también los necesito. Además las dudas a través de redes (instagram, Facebook), teléfono y demás medios se han multiplicado y aunque os respondo a todos, a veces la respuesta es que debo o veros (en consulta) o al menos a través de una consulta on line. Estas últimas actividades, por supuesto, son remuneradas. Y ahí empieza el problema…

Creo que soy generosa, creo que mi vocación es mucho mayor que mi capacidad de gerencia, mayor que mi vena de empresaria (empresaria forzada) pero todo tiene un límite y el límite es que mi familia también tiene que comer y en mi casa comemos de esto.

Seguiré ayudando en lo que pueda de forma gratuita (dudas de vacunas, covid y embarazo, dudas concretas de alimentación, de dosis de medicación, y mil preguntas más que me hacéis por privado y que respondo), como he hecho hasta ahora. Pero entended que si lo que vosotros necesitáis es que un pediatra valore un cuadro complejo en vuestro hijo que tiene fiebre, y tos, y esta erupción, y esta estreñido y… vais a tener que tener enfrente a una persona que estará cobrando por su trabajo ya sea porque tiene la suerte de ser un funcionario con un sueldo fijo o porque es un autónomo, como muchos de vosotros que debe también cobrar por lo que hace.

Espero que se entienda que si no cobro mi trabajo, no cobro de ninguna otra parte y que el límite de mi generosidad está en el deber y la obligación de mantener a mi familia.

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